Estaba rodeado de electrodomésticos. De ordenadores portátiles. De televisiones…, pero no podía más. Tenía dos minutos para 'arrasar' con la tienda. Para hacer la compra de su vida por obra y gracia de Media Markt. Era su cliente '100 millones'. El escogido entre más de 50.000 usuarios que habían rellenado su solicitud para campar a sus anchas con una cesta sin fondo por los pasillos de la multinacional alemana.
El elegido, un vallisoletano. Ángel Gómez. Transportista, de 48 años. «Mi hija me ha pedido un Mac», aseguraba en los prolegómenos de la carrera más importante de su vida. A Ángel le habían salido compromisos de «debajo de las piedras». «Yo le he pedido una lavadora», afirmaba su mujer. Fueron dos de las demandas. Había cientos. Y solo dos minutos.
Durante los días previos, incluso semanas, el agraciado en el sorteo se había marcado una ruta como si se tratara del juego del tesoro. La 'X' más grande, en la zona de ordenadores y portátiles. También en su hoja topográfica había una reserva para las cámaras réflex y para una pantalla LED de 46 pulgadas -su particular joya de la carrera-. Todo en dos minutos. Le sobraron diez segundos en los que el agraciado cliente tuvo que tumbarse junto a su botín, con la lengua fuera y con claros síntomas de agotamiento.
Hasta su mujer se asustó. «Objetivo cumplido». 28.000 euros en electrodomésticos y un gesto de victoria para las decenas de cámaras encargadas de inmortalizar el momento, quién sabe si destinado a sustituir al ya famoso Rocky español, protagonista de la campaña publicitaria de Media Markt.
Ángel se metió en el papel. Ataviado con el chándal rojo, presumió de preparación y estudio del concurso. Contó con la ayuda del gerente del centro de Valladolid, Alejandro Codina. «A nosotros nos viene al pelo que el afortunado haya sido de aquí», comentaba antes del show que contó con todos los trabajadores de la tienda de Equinoccio.
La campaña 'El número 1 celebra el cliente 100 millones' es exclusiva del territorio nacional. Made in Valladolid desde que ayer Ángel irrumpiera en escena para hacer la 'compra' de su vida.
El vallisoletano consiguió en los dos minutos que duró la carrera una pantalla LED de 46 pulgadas, una play station 3 y dos aspiradores robot.
El grueso de su 'compra' estuvo protagonizada por los ordenadores portátiles y 'tablets'. En total, logró coger cuatro portátiles, cinco ordenadores Mac y un 'tablet'.
Su cesta, valorada en 28.000 euros, la completaron cuatro cámaras réflex, una cámara de vídeo 3D, un dispositivo de GPS, un libro electrónico y seis teléfonos móviles.
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