La guerra de precios que agita el mercado del móvil y obliga a los operadores a recortar tarifas comienza a absorber conceptos fijos como el establecimiento de llamada. El operador móvil virtual (OPM) Masmóvil lanzará a partir de mañana una nueva tarifa en la que desaparece este coste y fija en 8,5 céntimos el precio del minuto. La oferta no establece consumos mínimos ni compromisos de permanencia pero está ligada a la compra de un bono para navegar en internet por 6,90 euros con un límite de 500 megas.
La actividad de los pequeños OPM -Masmóvil tiene 120.000 clientes- y las ofertas de portabilidad son las principales razones por las que los precios del móvil en España continúan bajando. Según un estudio sobre este mercado realizado por la consultora Neoris las tarifas más baratas son los ofrecidos por compañías como Másmovil, Pepephone y Simyo.
La diferencia del precio por minuto entre las tarifas de contrato sin cuota fija más caras y las más baratas son de hasta seis veces el precio. En cuanto a internet móvil, la diferencia entre tarifas de los operadores más baratos para las cuotas de consumo más altas llegan a suponer aproximadamente la mitad.
Aunque los precios por hablar por el móvil han caído de forma significativa en los últimos meses, España sigue estando por encima de la media en este aspecto. El informe Eurostat elaborado por la Comisión Europea reveló el pasado mes de junio que ue la telefonía móvil es como media, un 60% más cara que en el resto de la UE con precios de hasta 16 céntimos por minuto frente a los 10 céntimos que como media se paga en el resto.
Precisamente el pasado mes de junio Movistar y Orange rebajaron sus tarifas a mínimos al situarlas en seis céntimos minuto retirando con un consumo mínimo mensual de seis euros en el caso de la filial de France Telecom y nueve euros en el de Telefonica.
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